ROMAN LESCANO - HISTORIA DEL CINE II - LA METRO JULIO 2011

ROMAN LESCANO - HISTORIA DEL CINE II - LA METRO JULIO 2011

4. Alma Reville: La musa inspiradora del maestro

Alfred y Alma recién casados
Alma Reville fue un ingrediente esencial en éxito de Hitchock como cineasta,  tal cual lo escribió el crítico Charles Champlin: ''El toque Hitchcock tenía cuatro manos, y dos eran de Alma''. Se enamoraron y casaron cuando eran muy jóvenes y desde entonces jamás se separaron.

Trabajando juntos
Hitchcock consideraba que su opinión era sagrada, ya que ella llevaba mas tiempo  en la industria cinematográfica. Ella era el centro de su vida y lo fué por mas de 50 años, fue su musa, su guia y colaboró en muchas de sus películas, sobre todo en las primeras como asesora en donde siempre trabajaron a la par, desde el inicio de una idea hasta su desarrollo total.
Alma era guionista y tenía experiencia en el rubro por lo cuál llegaba a conocer todas las facetas de las películas que hacía con su marido, se sabía los guiones al pie de la letra y era capaz de detectar pequeñas cosas que no estaban bien y decirselas a Hitchcock. Lo influenciaba a tal punto que si ella decía que no Alfred era capaz de olvidar todo un proyecto.

El trío Hitch
El 7 de Julio de 1928, Alma dió a luz a una hija, Patricia Alma Hitchcock y desde ese momento se los conoció como ''el trio Hitchcock'', la dependencia de Alfred de su familia pero en particular de Alma fue siempre muy bien conocida. Era tal el amor y la devoción que le profesaba que cuando Alma fue diagnosticada con cáncer Hitchock trató de tirarse por la ventana de un edificio. Afortunadamente, el tratamiento de Alma fue existoso, y el matrimonio de cineastas continuó durante dos décadas más.

Uno de los gestos mas importantes y recordados que Alfred tuvo hacia Alma fue el discurso que dió ante The American Film Institute cuando le otorgaron el premio a toda su carrera en 1979 y en donde dijo ''…pido permiso para mencionar por su nombre a solo cuatro personas que me lo han dado todo, cariño, reconocimiento, ánimo y constante colaboración. La primera de las cuatro es montadora, la segunda es guionista, la tercera es la madre de mi hija Pat y la cuarta es tan buena cocinera que siempre ha hecho milagros en la cocina. Y las cuatro se llaman Alma Reville…''



Nacieron en Inglaterra con un par de horas de diferencia,  y cuando murieron fue en un intervalo de dos años. Sus cuerpos fueron cremados y sus cenizas esparcidas en el océano Pacífico. En la muerte como en la vida, Alma y Alfred juntos por siempre.

Alma y Alfred